Esta semana, los Hurricanes de la Universidad de Miami en Florida han tomado mucho protagonismo tras su sonada victoria en Durham frente a Duke. Charlamos con Iván Cruz Uceda.
Nada mas terminar el partido, se me vino a la cabeza entrevistar a Iván Cruz-Uceda.
Iván juega ahora mismo en liga ACB, defendiendo la camiseta celeste del Breogan de Lugo, pero en su momento fue alumno de la U. Y sí, también conoce la sensación de ganar a Duke.
Qué mejor momento que este para repasar su trayectoria en Coral Gables y contar con el testimonio de alguien que conoce perfectamente la NCAA.
Gustavo: Bueno Iván, sobra decir lo agradecido que estoy de que te hayas prestado desde un primer momento a la entrevista. Vamos a empezar por esa etapa previa a tu viaje a Estados Unidos.
Ivan: Ese año estaba en el Estudiantes y quería irme pero por el tema de que allí empiezan las clases en Agosto y me habían quedado un par de asignaturas para septiembre, no pude. Entonces esa temporada me fui a Las Rozas (LEB Plata) y fue un buen año en el que ganamos muchos partido, quedamos segundos y casi ascendemos. Al final subió el Andorra que ahora mira donde está (ACB). Cuando terminó la temporada aproveché para irme en Mayo y tomé unas clases en la Universidad a la que fui, Harcum College (NJCAA). Mi mejor amigo, Dani Busto ya estaba allí y el primer contacto que tuve con ellos fue gracias a él.
Tenía alguna oferta como por ejemplo Georgia State para irme directamente a NCAA D-I, pero el examen de acceso no me salió bien porque no tenía el nivel de inglés alto.
Me gradué en Harcum y ese verano un montón de universidades se interesaron por mí. Elegí Miami pero como anécdota te contaré que estuve a punto de irme a Villanova, que justo ese año fueron campeones.
Gustavo: Me interesa profundizar en esta primera experiencia en JU-CO (Junior College) para que nuestros lectores que empiezan a interesarse por la NCAA tengan claro de lo que estamos hablando.
Iván: Hay chicos que salen de high-school y por diferentes causas no han sacado la nota media suficiente para acceder a la Universidad (2,5-2,8 sobre 4). Entonces se opta por este tipo de Universidades donde la exigencia es mas baja pero que también te permiten graduarte y jugar al baloncesto. En mi caso fue por el inglés, no por la media y una vez allí mis notas fueron muy buenas.
Gustavo: Esta claro que comenzaste a destacar a nivel individual, ¿Cómo fueron las cosas en lo colectivo?.
Iván: Harcum nunca había ido al torneo nacional y lo conseguimos. Quedamos cuartos del País. No logramos ganar porque nos emparejaron en semis con un equipo que era muy duro y tenía mucho banquillo. Al final nos ganaron de 3 o de 4, pero bueno, para la universidad fue un logro tremendo.
Gustavo: Y llega el momento de pasar al siguiente nivel.
Iván: Si, visité varias universidades y finalmente me decidí por Miami porque creía que la forma que tenía de jugar el equipo me venía bien.
Es un escalón mas en cuanto a profesionalidad, más físico, mas táctico y más talento. El trabajo físico me vino muy bien porque aunque en España también se trabaja, allí es mucho mas especifico.
Gustavo: ¿Cómo van las cosas durante ese primer año?
Iván: No como yo esperaba. La NCAA me suspendió con 16 partidos. Yo no había cobrado nada durante mi estancia en LEB Plata porque constaba como jugador vinculado. Es decir estaba en el sub-21 de Las Rozas aunque subía con el primer equipo. Precisamente no quise cobrar porque quería irme a Estado Unidos y sabía que eso podía ser una causa por la que me tiraran para atrás. Sin embargo, la NCAA consideró que la LEB Plata era una liga totalmente profesional y por eso me sancionó. También cuando estaba en el Estudiantes subía alguna vez con el ACB, si cobrar claro, pero bueno ya estaba en el banquillo y al ser la ACB la liga más importante de Europa…en fin, tiraron por ahí.
Una vez terminada la sanción si pude jugar unos 20 partidos pero sinceramente…ya no fue lo mismo. Fue un verano de mucha incertidumbre porque no sabía si me iban a dejar jugar, la NCAA tardaba en pronunciarse y Miami no podía hacer nada. No me podían dar la beca, yo ya estaba graduado…
Con todo, ese primer año tiene muchas cosas positivas. El entrenador confía en mí y juego bien. Debuté en Notre Dame y me hizo mucha ilusión. Miami está en la Conferencia ACC y eso me permitió visitar canchas como las de Syracuse, North Carolina o Louisville. Llegamos a la final del NIT que se disputó en el Madison Square Garden y fue una experiencia muy bonita.
Gustavo: Y tu segundo año en Miami
Iván: Fue mejor. Estaba más asentado en el equipo, mejoré muchísimo mi físico y tuvimos una increíble temporada. Durante muchas semanas fuimos Top 5 del País y llegamos a ser Top-3. Ganábamos todo, teníamos un equipazo. Logramos ir al March Madness lo cual fue otra experiencia tremenda por toda la repercusión que tuvo. No es fácil jugar el torneo nacional y menos siendo español. Llegamos a Sweet 16 donde nos eliminó Villanova que luego saldría campeón.
Gustavo: Y ese momento tan bonito de la Senior night, ese último partido en el que os despedís que la que ha sido vuestra casa debe ser muy especial.
Iván: Muy bonito,vinieron mis abuelos porque mis padres trabajaban. Se emocionaron, les encanta el baloncesto y estar allí en la pista con toda la gente apoyándonos… además ganamos y jugué muy bien así que estuvo muy guay.
Gustavo: ¿Tuviste la oportunidad de jugar en la pista de los Heat?
Iván: No, pero si que he ido a ver algún partido. Muchos jugadores NBA veranean en Miami y jugaban partidos contra nosotros. Lebron, Kevin Durant, Westbrook, Rondo. Te lo pasas super guay porque al final eres un chaval y estas jugando con los mejores del mundo. Poder pasarle el balón a Lebron… pues imagínate.
Gustavo: ¿Qué jugadores de college te llamaron más la atención?
Iván: A Brandon Ingram le tuve que defender, tiene un primer paso tremendo, unos brazos muy largos para hacerte un mate muy fácil. Jahlil Okafor, Tonye Jekiri (Unics Kazan) que jugaba conmigo, hay miles.
Gustavo: Y tu entrenador Jim Larrañaga
Iván: Un entrenador con mucho prestigio que tal vez pudo aspirar a más pero que como otros decidió quedarse en la NCAA. Mi máximo respeto.
Gustavo: Y algún equipo que te llamara la atención.
Iván: Princeton me llamó muchísimo la atención. Todos chicos blancos que jugaban un baloncesto excelente. Físicamente no muy atléticos pero jugaban increíble. Nos pusieron en muchos aprietos. Pasaban muy bien la bola, tenían unos sistemas muy organizados que lograban que el balón llegara a un tirador solo. Además del 1 al 5 podían tirar.
Gustavo: Muchos equipos de la Ivy League transmiten esas sensaciones. A mi me gusta mucho verlos, como también a las chicas de la NCAA porque en sus partidos puedes apreciar muchas de esas virtudes que tu comentas.
Iván: Por cierto, anecdóticamente, conocí a la que es mi pareja y mi prometida en Miami (Laura Quevedo quien también jugó para esa universidad).
Aquí quiero hacer un pequeño inciso: Laura Quevedo no necesita presentación. Su palmarés habla por si solo. Y quiero aprovechar para romper una lanza a favor del baloncesto femenino que desgraciadamente no siempre es tratado con el respeto que se merece. Personalmente soy tan aficionado a ver a las chicas jugar a baloncesto como a los chicos y desde luego por mí no va a quedar el intentar darle toda la visibilidad que pueda desde mi modesta posición.
Gustavo: Bueno Iván vamos terminando. Terminas ciclo universitario y empieza tu carrera profesional.
Iván: Esperé alguna oferta de ACB pero en ese momento no llegaron así que me fui a la LEB Oro porque también quería estar cerca de casa. Breogán confió en mí y me dio una oportunidad. Estoy súper agradecido porque fueron los primeros en ponerse en contacto conmigo. Llevo seis años de carrera profesional y ahora he vuelto a Lugo (ACB).Tenemos muy buena relación y aquí estoy muy a gusto.
Gustavo: Muchas gracias y buena suerte Iván.
Iván: Gracias a vosotros.
Charlamos con Jorge Sanz, Director de operaciones deportivas en Gonzaga