Denver Nuggets busca la dinastía

Los Denver Nuggets acaban de ganar el primer anillo en la historia de la franquicia tras 47 años. Además, lo han hecho en su primera presencia en las finales. Y, para mayor claridad, han ganado 16 de los 20 partidos disputados a lo largo de los Playoffs, sin sufrir excesivamente en ninguna de las series. Hay quien dice que ha sido «fácil» por ganar a dos octavos, un séptimo y un quinto. Sin embargo, la nómina de superestrellas a las que han dejado por el camino sirve como justificante para cualquier tipo de argumento.

Tras una temporada regular donde dominaron ampliamente hasta marzo y se dejaron llevar un poco en el último tercio de la temporada, los de Colorado llegaron en plena forma a la parte importante. Tras la derrota en las finales del Oeste de la burbuja en 2020, este era su primer año con salud total. Recuperaron a Jamal Murray y Michael Porter Jr. para la causa, piezas que han demostrado ser claves. Además, los jugadores alrededor de Jokic eran los mejores de su carrera. Malone dejó dudas durante la temporada regular, pero luego ha demostrado que solo hacía pruebas para lo importante. Con la ventaja que tenían, pudieron dosificar sus esfuerzos y llegar en plenitud física.

Dominio total

Ya en postemporada, los Nuggets ganaron a unos combativos Wolves, que tuvieron que jugar 2 partidos de play-in. Pese a las lesiones, plantaron cara en varios partidos de la serie, demostrando que son un equipo muy a tener en cuenta para el futuro. Tras ellos, los favoritos Suns eran la primera piedra de toque importante. Pese a repartirse las victorias como locales, los Nuggets sacaron su mejor juego para los dos últimos partidos, dando un serio correctivo a los de Arizona en el sexto.

Después esperaba la pesadilla de Denver Nuggets en Finales del Oeste, los remozados Lakers. Llegaban muy confiados tras ganar a los vigentes campeones en semifinales. Sin embargo, pese a que todos los partidos estuvieron igualados, el resultado final de 4-0 no dejó mucho lugar a las dudas. Con esto, los Nuggets consiguieron un descanso que fue clave. También lograron un estatus como favorito frente al vencedor de la guerra que se desataba en el Este. Finalmente, los milagrosos Heat avanzaron, dando el factor cancha a la ciudad a mayor altura de la liga. Pese a ser los primeros que conseguían ganar allí en más de dos meses, los Nuggets se pusieron el mono de trabajo en Florida y lograron una convincente victoria en 5 partidos.

El mejor dúo de la liga

Ya sabíamos que Jokic y Murray eran la clave del éxito de los Nuggets y que su subida de prestaciones en PO podría llegar. Como pasa muchas veces, la realidad ha superado cualquier expectativa. Jokic se ha consagrado como el mejor jugador de la actualidad. Su increíble dominio de todas las facetas ofensivas es abrumador. El atacante total. Además, ha acompañado esas prestaciones con una mejora notable en defensa, especialmente en la protección del aro. Ha sufrido menos que en anteriores temporadas contra la avalancha de P&R a la que pretendían someterle los rivales. Ha dado un gran paso hacia la grandeza.

Murray es el ejecutor perfecto. El mejor escudero para Jokic y parte del alma de estos Denver Nuggets. El canadiense volvía tras casi año y media lejos de las pistas y ha usado la regular season para ponerse a tono. Estos dos meses, pese a no ver actuaciones dignas de Bubble Murray de 50 puntos, ha demostrado una consistencia y una química con el serbio que les eleva al podio de los mejores. Su esfuerzo defensivo cuando le buscaban los aleros en el switch y su mejorada capacidad de pase han sido elementos muy decisivos.

La navaja suiza

Los campeonatos no solo se ganan con estrellas. Los jugadores de rol cada vez son más importantes. Los de Malone son perfectos. Pese a cobrar mucho, Michael Porter Jr. ha tenido que reinventarse. Tras un año fuera por su tercera operación de espalda en 5 años, el ex de Missouri se ha establecido como un tirador letal (pese a su serie de tiro en las Finales). Además, ha dejado más detalles en ataque y, sobre todo, se ha convertido en un importante activo atrás. Sin ser un defensor brutal, es muy bueno haciendo ayudas, no se pierde en el esquema y se ha consagrado como gran reboteador.

Ya se sabía hace un año que la llegada de KCP era necesaria. Pese a la tristeza de despedir a Monte Morris, el daño colateral dio paso a un jugador ideal. 3&D con capacidad para defender varias posiciones y experiencia en un equipo campeón. Pese a su inconsistencia en ataque, estos Denver Nuggets no se entienden sin Caldwell-Pope.

Aaron Gordon es el alma del equipo. Tras ser una estrella secundaria en Orlando, su rol perfecto estaba en Colorado. Siendo una opción fiable debajo del aro y con menos responsabilidad en ataque, puede centrarse en defender. Su increíble potencia física, su química con Jokic y su versatilidad en ambos lados de la pista le convierten en un jugador de valor incalculable.

Un banquillo productivo

Sabemos que las rotaciones se acortan en Playoffs, donde cada minuto importa. Los minutos sin Jokic seguían siendo la asignatura pendiente del equipo. Tras muchas pruebas y hasta cambios en el deadline, Malone se quedó con tres hombres de confianza. El veterano Jeff Green ha aportado una gran presión sobre el aro rival, aunque puede que haya sido su última temporada con protagonismo. El rookie Christian Braun ha aportado mucho en defensa desde su primer partido. Pese a no jugar en la serie contra Lakers por el tamaño de los angelinos, se reivindicó en las Finales. Presente y futuro de Denver Nuggets.

Por supuesto, Bruce Brown ha ascendido al olimpo de los jugadores de banquillo. Su producción en ambos lados de la pista y su capacidad de jugar con y sin balón le han convertido en el mayor robo de la última agencia libre y en un objetivo muy cotizado para este verano, ya que es probable que salga de Colorado en busca de un contrato más sustancioso.

Todo atado en Denver Nuggets

Como acabamos de comentar, Bruce Brown podría irse por dinero, aunque existe la esperanza entre los aficionados de que renuncie este año a unos cuantos millones para intentar conseguir un back-to-back. Es la única pieza clave que podría tener que ser sustituida este verano. Acaban varios contratos de jugadores que pueden aportar minutos de calidad en temporada regular, por lo que veremos si Calvin Booth sigue con la mentalidad agresiva que le ha caracterizado en sus primeros movimientos como General Manager. De momento le ha funcionado la estrategia, pero es difícil mantener la unidad del grupo mientras los rivales se refuerzan y se ven posibles carencias que pueden ser subsanadas.

Evidentemente, el margen salarial para maniobrar no es para nada holgado, por lo que no se esperan grandes cambios en el núcleo principal del equipo. Los jugadores más importantes tienen contrato para algunos años más y eso será un problema del futuro. Además, hay que recordar que las piezas clave del equipo son bastante jóvenes y algunos están entrando en su prime o con posibilidades de mejorar.

Además, parece que el entrenador Mike Malone, severamente criticado, ha encontrado su plan de juego ideal y se asienta como uno de los mejores motivadores y un entrenador capaz de hacer ajustes productivos en playoffs. El staff que le acompaña también ha adquirido reconocimiento y, de hecho, su asistente David Adelman ha estado sonando en las últimas semanas como candidato a ascender al puesto de entrenador jefe en algunas de las franquicias que estaban sin head coach.

Jóvenes prometedores

Hemos hablado de Christian Braun, la última perla elegida en el puesto 21 del pasado Draft. Sin embargo, no es el único joven productivo. Hay bastantes esperanzas puestas en Peyton Watson, un jugador cuyo perfil físico podría ayudarle a ganarse un puesto en la rotación si se desarrolla adecuadamente. Además, Zeke Nnaji y Vlatko Cancar seguirán teniendo bastante presencia en la larguísima temporada regular. Colin Gillespie podría ganar protagonismo si los Nuggets no adquieren un base con experiencia. Pese a haber estado lesionado toda la temporada, los de Colorado confían en que pueda convertirse en un perfil parecido a lo que llegó a ser Monte Morris, organizando el juego con mucha pausa.

Evidentemente, la liga está llena de talento. En los últimos 5 años, ha habido 5 campeones y 8 finalistas distintos (solo Golden State Warriors y Miami Heat han repetido). Muchas franquicias tiene talento de sobra para llegar a las rondas finales y solo la salud u otros factores inesperados les privan de ello. Es difícil repetir campeonato, pero está claro que Denver Nuggets tiene unos buenos mimbres para ser candidato al anillo durante varios años si la salud respeta a los jugadores y el proyecto sigue con la misma idiosincrasia que hasta ahora.