EL FACTOR X DE LOS BLAZERS

En este inicio de NBA estamos teniendo una conferencia oeste bastante confusa. Hay equipos que esta temporada estaban bastante claros que iban a ser punteros, pero no lo están demostrando, Warriors y Clippers son un claro ejemplo de ello. Por otro lado, tenemos equipos que están sorprendiendo y se están colocando en la parte alta de la clasificación de la conferencia. Ahí entran los Trail Blazers donde en este primer mes de competición van primero con un récord de 9-4 dejando grandes partidos tras unas sensaciones pésimas en preseason, donde no ganaron ningún encuentro.

Lo de Portland no es casualidad y desde mi punto de vista de estas sorpresas de inicio es el proyecto que más me creo personalmente. Y esto no se debe al nivel de Damian Lillard, ya que estuvo fuera 5 partidos y el equipo de Oregón se ha mantenido en lo más alto de su conferencia. Esto se trata a un gran verano, a una buena confección de plantilla, y porque no decirlo a buscar el factor X que hizo a Portland un equipo que en 2018-2019 llegó a finales de conferencia, básicamente repasar que, fue la clave del pasado que para una franquicia infravalorada, les hizo rozar las mieles del éxito.

Viajando 4 años al pasado.

Nos encontramos ahora en la temporada 2018-2019 y con cambios de cromos, la plantilla de Blazers está hecha de una manera similar. Estaban Damian Lillard y Jusuf Nurkic. Con la estrella exterior, bailaba también otro pequeño guard donde su especialidad es la anotación (McCollum antes y Simons ahora) y sobre todo tienes especialistas defensivos en las alas dando equilibrio a las dos estrellas exteriores, siendo para aquellos Blazers el factor X que les ayudaba a ganar encuentros. Aminu y Harkless nunca han sido jugadores que se hayan llevado los focos, siempre eran trabajadores para el equipo, role players con una función muy específica, defender y meter algún tiro abierto que les llegase, algo similar a lo que son en Mavs, Reggie Bullock y Dorian Finney Smith. Estos dos aleros encabezaban junto a Nurkic las avanzadas defensivas de aquellos Blazers, siendo capital en un equipo donde se veía dos puntos débiles claros, como esconder a Lillard y McCollum atrás. En esta ecuación también podemos meter a Evan Turner, que, siendo otro tipo de jugador, y estando sobre pagado, es detrás de los nombres mencionados el que mejores números tienes de defensa, a pesar de que hacía la función de generador saliendo del banquillo.

Se ve un patrón claro en aquellos Blazers y en esta offseason han decidido implementarlo, no hace falta estrellas de élite, sino acompañar y proteger bien a Damian Lillard, y en una NBA donde estamos viendo que el proyecto es más importante que un cúmulo de estrellas, ya es un gran paso comparado con otros equipos. La diferencia con la dicha campaña es que los aleros que tienen estos Blazers tienen bastante más calidad ofensiva que los mencionados anteriormente.

Josh Hart, líder defensivo.

El escolta formado en Villanova parece haber encontrado su lugar en la actual NBA. Tras años dando tumbos entre los Ángeles y Nueva Orlenas donde siempre nos dejaba detalles de su talento defensivo, pero donde nunca daban el 100% de confianza en él, ha encontrado en Portland su lugar como escudero principal de Damian Lillard y Afernee Simons. Hart lidera las estadísticas defensivas de Blazers teniendo la mayor cantidad de defensive win shares del equipo y siendo después de Nurkic el que mejor defensive rating tiene del equipo. Por otra parte, aunque no es un dato que esté 100% relacionado con la defensa, Hart lidera el número de rebotes cogidos en toda la NBA de jugadores de menos de dos metros, siendo una figura más de intimidación y captación del rechace para formar una nueva ofensiva. Por fin Lillard tiene su bestia defensiva perimetral.

Jerami Grant, modo All Star.

Seguramente la gran diferencia con los Blazers que llegaron a finales de conferencia en 2019 es que ninguno de sus aleros tenía el talento que tiene el ex de los Pistons. Grant es el ejemplo perfecto de jugador que funciona en ambos lados de la cancha, defensor que puede cubrir hasta 4 posiciones y ofensivamente un jugador que te puede meter 18-20 puntos por encuentro sin despeinarse. Jerami nunca puede funcionar como primera espada, pero sin como segunda o tercera teniendo a un líder claro como Dame Lillard y también acompañado como Afernee Simons. Esta temporada está siendo el tercer mejor jugador defensivo de Portland en cuanto a estadística avanzada (tras Hart y Nurkic) y el tercer mejor ofensivamente (tras los dos guards del equipo). Aparte de esta compensación en ataque-defensa, Grant está siendo decisivo en las victorias de Blazers teniendo momentos clutch ante Pelicans, Lakers y Heat. Tres victorias ajustadas que hace que el récord actual de los Blazers sea de 9-4 en vez de 6-7 si no hubiesen entrado esos tiros clave.

Y Billups lo sabe.

Chauncey Billups llegaba al banquillo de Blazers con 0 experiencia como entrenador. Solo estuvo un año como asistente de Tyron Lue en los Clippers y decidió dar el salto como primer entrenador. Su primer año es difícil de evaluar ya que con la lesión de la estrella Lillard los Blazers decidieron traspasar jugadores para tener una masa salarial suficiente para fichar en verano.

Billups quería copiar también el modelo Clippers, jugadores defensivos pero que en ataque pudieran aportar. Por ello jugadores como Jerami Grant, Justice Winslow y Josh Hart son más que importantes en estos Blazers. También el rookie Shaedon Shaedon Sharpe, que sus cualidades físicas le está dando un plus a Portland en ambos lados de la cancha. Pero también los jugadores que llevan un tiempo en la franquicia de Oregón están aportando en ambos lados de la pista. Nurkic está siendo un jugador más centrado en intimidar y corregir como rim protector mientras que Afernee Simons está mejorando mucho en el posicionamiento defensivo dejando de ser un miss match para el rival.

El ejemplo más claro de mejora defensiva es que Blazers ahora mismo es la séptima mejor defensa del campeonato, al contrario que la temporada pasada que fueron la peor. Portland lleva sin ser top 10 mejores defensas desde la temporada 2017-2018. Haciendo año a año una bajada de nivel defensivo hasta codearse con los cinco de abajo en las últimas tres temporadas. Pero ya no parece ser un problema para estos Blazers.