Corría el año 1995 cuando los Minnesota Timberwolves apostaron mucho drafteando a un espigado ala-pívot de 2,11. El riesgo se justificaba porque ese chaval llegaba a la NBA directamente desde el instituto. Igual era apostar muy fuerte pero a ese chico, Kevin Garnett, acabó convirtiéndose en uno de los grandes de la NBA y ya es Hall of Famer. Garnett fue un joven aunque sobradamente preparado.
Precisamente en ese mismo 1995, Renault lanzaba una campaña publicitaria mítica para su nuevo Clio. El que acabó conociéndose como el Clio JASP se lanzaba con una campaña orientada a jóvenes de entre 20-30 años en el que se simbolizaba el ascenso de estos chicos a los puestos de poder de las grandes empresas con el Renault Clio como filón.
La llamada generación JASP engloba a los nacidos entre 1960 y 1980, lo de joven aunque sobradamente preparado se debe a que son la generación más formada hasta ese momento. Pertenecen a una generación que habla varios idiomas, todos tienen estudios universitarios e incluso con máster. Pero su gran problema es que el mercado laboral no está preparado para ellos. Kevin Garnett fue un joven aunque sobradamente preparado y, al recientemente miembro del Hall of Fame, podemos acompañarlo de muchísimos jugadores de la NBA que despuntaron muy jóvenes y fueron importantísimos para la historia de la mejor liga de baloncesto del mundo.
JASP de la música
Los premios Grammy, denostados en muchas ocasiones, son los galardones dedicados a la música. El Gran Slam, el Big Four, el pack completo es ganar el Grammy al artista novel, Álbum del año, Grabación del año y Canción del año. Aunque el premio al artista novel es el máximo exponente del premio al joven aunque sobradamente preparado, también hemos encontrado a estos JASP en las otras categorías grandes.
Tenemos que diferenciar entre canción y grabación del año para poder entender qué se vota y valora en cada categoría. El galardón al Álbum, además de premiar al artista o grupo y al conjunto del disco también es un premio para los productores. El premio de canción del año es para los compositores, es decir, los que componen la música y la letra. Mientras que el de grabación del año es un galardón para los intérpretes y los encargados de mezclar la canción. Digamos que la grabación es para los creadores y la canción para los ejecutores.
En este artículo vamos a desgranar casos y situaciones de grandes jugadores que despuntaron desde su año rookie y que consiguieron mucho más que ese galardón de novato del año. En este artículo vamos a conocer a varios JASP, joven aunque sobradamente preparado de la NBA.
Chamberlain y Christopher Cross
En la temporada 59/60 Wilt Chamberlain se hizo con el ROY y el MVP. Única vez en la historia. Y se quedaron a las puertas de la final. Cayeron en final de conferencia contra los Celtics de Russell. Si hablamos de Chamberlain, tenemos que hablar de un joven aunque sobradamente preparado pese a que no llegó a la NBA como un crío, ya había hecho sus pinitos previos.
Entre leyenda, mitología y realidad se mueve siempre la historia de Chamberlain. Sabemos que con el paso de los años y cuando no tenemos archivos gráficos suficientes, siempre se acaban exagerando los acontecimientos. Pues con nuestro amigo Wilt pasa algo similar. Según parece, el joven Chamberlain, para lanzar los tiros libres, cogía dos pasos de carrerilla y saltaba desde la línea de tiros libres para dejar una bandeja poco antes de llegar al aro. En 1956 se cambió la norma para dejar claro que había que lanzar los tiros libres con los pies en el suelo y sin sobrepasar la línea. Este cambio se produjo en el año freshman de Chamberlain, por lo que no parece casual.
Pero vayamos a la NBA. Tras unos años poco exitosos en Kansas decidió dejar tirados a los Jayhawks. Consciente de que no podía ir a la NBA debido a que no había cumplido el ciclo, tomó la decisión de irse a jugar con los Harlem Globetrotters como base. Efectivamente. Como base. Por fin recaló en Philadelphia, su ciudad natal.
Un novato con confianza absoluta en sí mismo
En una entrevista de pretemporada, llega a decir que en esa temporada va a ser el mejor jugador de la liga, que no importa su condición de rookie. Genio y figura. Pues no se equivocó el grandullón de los Warriors. Esa temporada se convirtió en el líder absoluto de los Warriors en todo. Fue el que más minutos jugó, el que más puntos anotó, el que más rebotes cogió… Chamberlain fue todo en Philadelphia. Y en la liga también fue líder en todo menos en asistencias, que el líder fue Bob Cousy.
Recordemos que los Celtics de Auerbach, aunque tenían a Bill Russell y Cousy, entre otros, se caracterizaban por repartir el juego y no había un solo jugador que aglutinara más volumen de tiro o pase que otro. Y esa estrategia comunitaria de Auerbach (aunque Russell era Russell y los demás eran los demás) fue la que hizo que los Celtics acabaran con el sueño del novato y mejor jugador del año en las finales de la NBA.
En los Grammy de 1981, Christopher Cross hizo pleno. Consiguió llevarse los 4 grandes en una noche: disco del año, canción del año, grabación del año y artista novel. Christopher Cross es ese clásico músico de los 80 con esas canciones tan líricas y que todas ellas parecen sintonías de series como Los problemas crecen. Por supuesto que Sailing es un temazo y un clásico absoluto. Y no nos podemos olvidar del Arthur’s Theme o de Never be the same, o de All Right, canción que la CBS utilizó como sintonía para el March Madness de 1983. No podía faltar la conexión de Christopher Cross con el baloncesto.
Billie Wes Eilish Unseld
10 años después de Wilt Chamberlain, en la temporada 1969/1970 se repitió la historia. Otro joven aunque sobradamente preparado hizo pleno en un mismo año. Wes Unseld ganó el ROY y el MVP en la misma temporada. En la carrera por el novato tuvo a Elvin Hayes y a Rick Adelman como grandes perseguidores, pero Unseld fue más regular y más dominante. Todo ello sin haber sido el mejor jugador de la liga, incluso ni fue el mejor jugador de su equipo. No quiero quitar mérito a Wes Unseld ni infravalorar su temporada rookie ni su carrera, pero es que es incluso un peor MVP que Russell Westbrook. Esa misma temporada Elvin Hayes, Wilt Chamberlain o Big O fueron mucho mejores que Unseld.
La diferencia con los anteriores es que los Baltimore Bullets fueron los mejores de la temporada regular aunque luego se llevaran un 4-0 en primera ronda contra los Knicks de un jovencísimo e intrascendente Phil Jackson. Años después, en 1978, Wes Unseld se resarció y ganó el anillo y el MVP de las finales.
Joven y referente para jóvenes
El caso de Billie Eilish es bastante similar al de Wes Unseld. La situación de la jovencísima cantante, hizo pleno de grandes. En 2020, igual que había hecho Christopher Cross en 1981, ganó disco del año, canción, grabación y artista novel. En el caso de mejor artista novel no tengo ningún inconveniente, Billie Elish era la mejor de todas las nominadas. El resto eran bastante malas. Pero es que en el caso de Álbum pasó por encima de discazos tremendos y mucho más completos como el I, I de Bon Iver o del Thank U, Next de Ariana Grande. En la categoría de grabación y canción del año superó de nuevo a Bon Iver, Ariana Grande o H.E.R con canciones mucho mejores, mejor compuestas y mejor letra.
Podemos discutir y aceptar que Bad Guy aporta un estilo nuevo y oscuro a la música comercial. Es una canción compuesta en modo menor, unas tonalidades estadísticamente fracasadas en términos de canciones exitosas.
Al final se optó por premiar una figura joven con un descaro impropio de su edad y que había conseguido arrastrar a una masa ingente de jóvenes y adolescentes, además de crear una imagen de marca muy apropiada para el 2020 que estaba avisándonos de lo que estaba por llegar.
Y aún por encima, en 2021 repitió victoria en la categoría de grabación del año por Everything I Wanted.
Jerry Lucas y las Dixie Chicks
Las Dixie Chicks, actualmente reducidas a The Chicks, son la segunda banda femenina con más discos vendidos de Estados Unidos. Las texanas solamente han podido ser superadas por las Destiny ‘s Child. Además de los récords de ventas, The Chicks, son el grupo country más importante de los últimos veinte años. En 2003, cuando comenzaban a tener éxito y ante la inminente invasión ilegal de Irak por parte del gobierno de los Estados Unidos presidido por George Bush Jr., hicieron una declaración explosiva. Como texanas dijeron sentirse avergonzadas de que el Presidente fuera también texano. En un momento tan volátil para el patriotismo americano, se produjo una ola de odio y boicot hacia las Dixie Chicks.
No era demasiado habitual que los artistas se manifestaran en contra de una intervención militar que se vendía como una operación liberadora. Además de que los artistas de country y, sobre todo, los texanos siempre habían sido muy conservadores. Después del fracaso masivo de la II Guerra del Golfo y del cambio de mentalidad de la sociedad estadounidense, el 2007 las devolvió a la Tierra. En esos Grammy de 2007 fueron las grandes ganadores de la noche llevándose los tres grandes: disco, grabación y canción del año.
Al igual que las Dixie Chicks fueron vejadas por una sociedad conservadora y cambiaron su nombre para dar un giro a su carrera y a su imagen, nuestros próximos protagonistas también vivieron tiempos oscuros. En la sección de “Ciudades de la NBA” en el programa de Puretas hemos tratado a la actual franquicia de los Kings. Viendo cómo ha sido la historia y recorrido de los actuales Kings, creo que son los que mejor se asemejan a la tragedia y resurgimiento de The Chicks.
Los gloriosos Royals de Big O
En la temporada 1963/1964, en el marco de esa década de Royal Glory con Oscar Robertson a la cabeza, los Cincinnati Royals se llevaron ROY y MVP. El novato del año fue Jerry Lucas y el jugador más valioso del año fue Big O. Los Royals no pudieron coronar con el anillo, ya que los todopoderosos Celtics de Bill Russell los eliminaron en la final de conferencia. Lucas fue muy regular durante toda la temporada, siendo el segundo mejor jugador de los Royals. Y a nivel global fue el más regular de los novatos siendo el que más minutos jugó y el máximo reboteador, mientras que acabó segundo en puntos y asistencias. Aunque lo más sorprendente es su impacto en el rebote, ya que a nivel global solo fue superado por Chamberlain y Russell.
El resto de la carrera de Jerry Lucas fue bastante productivo aunque, quizás no tan espectacular como parecía tras su grandísimo año de novato. Consiguió su ansiado anillo en 1973 con los Knicks y tras ese anillo, jugó un año más en New York y se retiró convirtiéndose en el primer jugador que consiguió campeonatos en el instituto, universidad, Juegos Olímpicos y NBA. De hecho, solamente le faltó el MVP para alcanzar un récord similar a nivel individual.
Los Celtics hacen pleno con el anillo, COY y MVP
Otro caso curioso se dio en la temporada 56/57. Como habíamos comentado en el episodio de Puretas sobre Red Auerbach, los Boston Celtics dominaban la liga con puño de hierro liderados por el que acabaría siendo El Señor de los Anillos. Pero en esa temporada 56/57 el mérito se lo llevaban dos chicos procedentes de la universidad de Holy Cross. Los chicos con pasado jesuita, conseguían en una misma temporada para la misma franquicia el anillo, el MVP y el ROY. El segundo anillo de los Celtics, el rookie del año para Tom Heinsohn y el MVP para Bob Cousy.
En 1984, la Academia coronaba Rey del Pop a Michael Jackson. Esa noche se fue para casa con ocho galardones, convirtiéndose en el artista que más Grammy ganó en una sola gala. Este récord fue igualado por Carlos Santana y su comercial Supernatural en el año 2000. Partiendo de la base de que Carlos Santana es un músico y un guitarrista espectacular y que Supernatural es un grandísimo disco, me parece una aberración ponerlo al mismo nivel que el Thriller de Michael Jackson. Aunque aquí lo importante es que ambos artistas consiguieron el mayor número de premios en una sola gala. En el caso de Michael Jackson, es importante resaltar que estaba multi nominado en varias categorías y que el único Grammy que no perdió contra sí mismo fue el que le arrebató The Police con Every Breath You Take.
Jamaal Mano Lenta Wilkes
En la temporada 1974/1975 los Warriors de Rick Barry ganaron el anillo y el ROY fue para Jamaal Wilkes. Casi diez años después de llegar a la Bahía desde Philadelphia y en su cuarta temporada en Oakland, los Warriors volvían a ganar la NBA. Jamaal Wilkes tenía 21 años y llegó a una franquicia mítica tras haber sido seleccionado en el pick 11. Wilkes es uno de esos jugadores caseros, toda su vida ha estado jugando en California y es un jugador que es bastante cercano a Jerry Lucas, pues ha conseguido los mismos campeonatos que Lucas con la única excepción de los Juegos Olímpicos.
Y un músico con una carrera o con un comienzo de carrera similar a la de Wilkes es Eric Mano Lenta Clapton. Es uno de los mejores guitarristas de la historia y con unas historias más trágicas de la música.
Aunque perdió el “ROY” contra José Feliciano en 1969, se resarció en 1973 ganando “The Concert in Bangladesh” el Grammy por grabación del año. Y en 1993, con la tristísima historia de Tears in Heaven cantando a su hijo fallecido, también por Layla, esa canción secretamente dedicada a la mujer de George Harrison y el Álbum del año por el precioso Unplugged.
Magic Straits
La mayor anomalía de un novato, después de la de Chamberlain y Unseld, es la de Magic Johnson. No ganó el ROY, que fue para Larry Bird, pero sí que ganó el MVP de las finales. Algo imposible en la actualidad.
Ese mismo 1980 nos trajo otra anomalía en el mundo de la música. En los Grammy, el “ROY” se lo llevó Rickie Lee Jones. Su primer álbum, por muy interesante que pareciese y marcaba el comienzo de lo que iba a ser la década en el mundo del soft-pop. Pero visto con perspectiva, tanto ese primer álbum como su carrera, es muy flojo y no aportó nada nuevo. Además de que su carrera no tuvo mayor éxito que ese primer álbum.
En cambio, en esa misma gala y en esa misma categoría de artistas noveles, se quedaron a las puertas unas leyendas absolutas como Dire Straits. Los británicos ya habían demostrado que planteaban un rock de calidad extrema con un Mark Knopfler derrochando virtuosismo en todo el álbum. Aunque su grandísima patada en la puerta fue con Sultans of Swings y Knopfler dejando uno de los solos de guitarra más antológicos de la historia del rock. Aunque la versión de estudio es muy normalita si la comparamos con las versiones en directo, en las que Mark termina de enmarcar esa obra en el olimpo musical. Hay versiones en directo de Sultans of Swings con un despliegue de Mark Knopfler en solitario de casi cinco minutos de virtuosismo puro.
Si tenía que buscar a alguien parecido a Magic Johnson en la historia de la música popular, tenía que ser el gran Mark Knopfler. Y eso que Sultans of Swings no es, desde mi punto de vista, la mejor canción de Dire Straits. Ni incluso la icónica Money for Nothing.
Magic y Bird, eternos compañeros de armas
Para mi, la mejor canción de la banda británica es Brothers in Arms con la que posteriormente ganaron dos premios Grammy. Brothers in Arms probablemente sea la temporada 86/87 de Magic Johnson en la que Earvin ganó anillo, MVP y MVP de las finales. La canción de Dire Straits y la temporada de Magic son una obra de arte excelsa. Y si le sumamos que Brothers in Arms ha sido utilizada en múltiples escenas y sobre todo en algunas tan icónicas como el momento en el que Jed Barlet toma la decisión de presentarse a la reelección tras el accidente de su admirada secretaria. Esos dos capítulos de The West Wing son también una combinación perfecta de lo que debe ser el final de una temporada.
Sobre Magic, Bird, Russel y Kareem se ha escrito y dicho todo o casi todo, pero aún así tengo muchas ganas de dedicarles un artículo o una serie para ellos solos. Es admiración pura la que siento hacia estas cuatro leyendas del baloncesto y de la sociedad estadounidense.
Kareem Adele-Jabbar
Kareem, aún Lew Alcindor ganó el ROY por su temporada 1969/1970 y en la temporada siguiente ganó el MVP, el MVP de las finales y el anillo. Sin olvidarnos de que después aún consiguió cinco anillos más, otro MVP de las Finales y cinco MVP más de la temporada regular. Por no hablar de que es una leyenda absoluta de la NBA, un referente como activista, defensor de los derechos de los afroamericanos, muy implicado socialmente y uno de los que estará siempre como uno de los mejores jugadores de la historia del baloncesto. Admirado por todos y odiado por muy pocos, fue el culpable (aunque la NCAA no lo quiera reconocer) de que se prohibieran los mates en la NCAA. Y para suplir esa faceta en la que era tan superior, desarrolló su famosísimo Skyhook.
La temporada rookie de Abdul-Jabbar fue tan abusiva como lo había sido la de Chamberlain. Y si no fuera porque la temporada de Jerry West y de Willis Reed fue tan bestial, igual Kareem se habría llevado también el MVP. Pero eso llegó al año siguiente con la llegada de Oscar Robertson.
Cuarenta años después de la llegada de Kareem a la NBA, en 2009, Adele ganó el Grammy por artista nuevo y se quedó con las nominaciones del resto de premios gordos. Pero en 2012 y 2017 se llevó todo aquello a lo que estaba nominada, incluyendo canción, disco y grabación. Adele ha ganado 15 Grammy de los 18 que ha estado nominada.
Ser un joven aunque sobradamente preparado no implica éxito asegurado
La generación de “joven aunque sobradamente preparado” son los que, actualmente rondan los 40-60 años. Son una generación que ha vivido la transición tecnológica. Es la generación que ha vivido las grandes crisis económicas y laborales. Son las personas que han tenido la capacidad para adaptarse a multitud de cambios sociales. Y al mismo tiempo, son la generación que más dudas plantean en temas científicos, conspiranoicos y que más reticencia han planteado con respecto a las medidas socio-sanitarias de 2020 y 2021.
En el caso de nuestros novatos del año y de nuestro jugadores más valiosos, han sido jugadores que han vivido en sus carnes el concepto de joven aunque sobradamente preparado porque ellos mismos fueron los más destacados en el baloncesto de su tiempo. No sabemos cuál será el recorrido de Morant, Doncic, Simmons, Brogdon y otros recientes ROY. No sabemos si alguna vez volveremos ver un joven aunque tan sobradamente preparado como Chamberlain o Unseld que consiga ROY y MVP en un mismo año. O un novato que lidere a su equipo hacia el anillo y sea nombrado MVP de las finales como Magic en 1980. Tampoco sabemos si volveremos a ver un jugador que tenga la necesidad de desarrollar una técnica de tiro para seguir siendo superior al resto como Kareem.
Joven aunque sobradamente preparado es una etiqueta que deberíamos poner a todos los jugadores jóvenes que llegan a la NBA. Porque si son capaces de llegar a la mejor liga de baloncesto del mundo con menos de 25 años, son claramente merecedores de esa etiqueta de joven aunque sobradamente preparado.