En la mitología romana Neptuno era el dios de los mares y las aguas. Hermano de Saturno –padre de los dioses– e hijo de Saturno. Sin llegar al nivel de Baco, a Neptuno se le consideraba un dios muy inestable porque a él se le achacaban las tormentas marítimas, el fuerte oleaje y las intensas corrientes marítimas que hacían perecer a los marineros más experimentados. Por otro lado –en un tiempo en el que se consideraba que la Tierra era plana– se pensaba que Neptuno era el encargado de soportar y sujetar el terreno continental porque se pensaba que las aguas mantenían estable la tierra que pisamos. Y si hay un programa universitario con ese azul característico de Neptuno, son los Wildcats. Y si hay un Neptune que tiene la encomienda de soportar el planeta Wildcat es Kyle Neptune de Brooklyn a Villanova es su recorrido durante su corta vida.
Kyle Neptune de Brooklyn a Villanova
Una vez acabado el March Madness y con todos los fans de Villanova con los ojos puestos en los reclutas de la próxima temporada, la bomba explotó en el campus. Jay Wright, –entrenador principal del equipo de baloncesto masculino de Villanova desde 2001– decidía dejar el banquillo y afrontar un pseudo-retiro como asesor principal del Athletic Director (director deportivo de la universidad).
Si la noticia de la retirada conmocionó a todos los fans de Villanova y sorprendió a todos los seguidores del baloncesto universitario en general; más sorprendente fue el nombre del nuevo inquilino del banquillo de los Wildcats. Kyle Neptune era un desconocido para mucha gente pero Kyle es un chico de la casa. El camino de Neptune hasta ser el head coach de los Wildcats es muy similar al que su predecesor recorrió hasta 2001.
Kyle Neptune salió de Brooklyn y llegó a Villanova con 23 años. Tras un paso por Niagara volvió a la vera de Jay Wright con 28 años. Y ya en su tercera vez vuelve al cargo más importante que todo entrenador ansía, entrenador principal de un programa histórico con solo 37 años. Jay Wright también tuvo tres etapas en los Wildcats: la primera como asistente del mítico Rollie Massimino con solo 26 años, la segunda como entrenador principal con 40 años y la tercera como asesor principal del AD con 60 años.
La historia de Wright fue contada parcialmente cuando el HOF dejó el banquillo de los Wildcats aunque no descartemos que haya más piezas sobre la leyenda de la ciudad de Philadelphia. Pero lo que está claro es que hay muchas similitudes entre ambos y se entiende perfectamente que Coach Wright se haya pasado catorce años persiguiendo a Coach Neptune para tenerlo siempre a su vera.
El chico de Brooklyn
Kyle Neptune es un chico criado en Brooklyn y con un legado importante en su instituto. Sin ser un jugador que haya destacado como universitario o como profesional. Y sin ni tan siquiera haber sido rankeado antes de ir a la NCAA, cuenta con un récord en el instituto. El adolescente Kyle estudió en un instituto privado-religioso a kilómetro y medio de donde se ubica actualmente el Barclays Center. Este instituto pertenece a una rama (o congregación educativa como diríamos en España) de la que en próximos artículos descubriremos más jugadores que hoy nos son más cercanos de lo que pensamos.
Pues Kyle Neptune ostenta el récord de 1650 puntos y es el líder histórico del instituto. No es por infravalorar a nuestro protagonista, pero en la “orla” histórica de ese instituto no hay más jugadores o entrenadores de baloncesto conocidos.
De instituto privado a universidad privadísima
Kyle Neptune salió del instituto sin ser rankeado y sin posibilidades de acceder a una universidad top a nivel baloncestístico. Pero Neptune siempre ha sido un chico especial y muy inteligente. Y Kyle optó por una universidad muy prestigiosa en el ámbito académico. Acabó estudiando los cuatro años en Lehigh. De esta universidad han salido nombres tan destacados como Cathy Engelbert –la actual Comisionada de la WNBA– y CJ McCollum. Los cuatro años de Neptune con los Mountain Hawks no fueron especialmente destacables pero se formó académica y personalmente, algo que luego sería una de sus mantras allá donde ha estado como asistente o como entrenador principal.
Primera etapa en Villanova
Tras graduarse en periodismo en Lehigh y jugar una temporada en diferentes sitios decidió que si quería ser entrenador, tenía que moverse rápido. Todos conocemos cómo fueron los comienzos de leyendas como Pat Riley o Erik Spoelstra y Neptune se encontró con una oferta de coordinador de vídeo en el equipo de baloncesto de Villanova. No dudó un instante y consiguió el puesto. Allí trabajó con George Halcovage –quien acabó siendo su asistente principal– y ambos descubrieron la importancia del estudio de las jugadas a través del revisionado. En una charla en el podcast de los Wildcats –en el que Jay Wright actúa como host principal– Neptune reconoció que ese trabajo fue clave para el resto de su carrera como asistente y entrenador principal, aunque también le recriminó (entre risas pero totalmente en serio) que el trabajo estaba muy mal pagado.
Nunca sobra recordar que en 2009 –tras la derrota contra North Carolina en la Final Four– Jay Wright estuvo a punto de dejar el banquillo porque esa derrota le afectó muchísimo. A su mujer le debemos el haberle convencido para que se quedase con el argumento de que llegar a la Final Four no era un fracaso si no una victoria. Según contaron en una charla amistosa en podcast, poca gente del organigrama sabía esta decisión de Jay Wright pero Kyle era de los poquísimos que conocía las intenciones de Wright.
𝐕𝐢𝐥𝐥𝐚𝐧𝐨𝐯𝐚 𝐢𝐬 𝐚 𝐔𝐧𝐢𝐪𝐮𝐞 𝐏𝐥𝐚𝐜𝐞 A look into Head Coach @kyleneptune’s journey back home to @VillanovaU ✍🏼
— Villanova MBB (@NovaMBB) May 31, 2022
via @TheAthletic https://t.co/NPabfvukm8
De coordinador a asistente
Recordemos que su prioridad era ser entrenador, por lo que cuando se le presentó la oportunidad de ser asistente, cogió sus maletas y se fue a Niagara University. Al norte del estado de New York y durante tres temporadas, se curtió como asistente. Las casualidades no existen pero Neptune fue asistente de Joe Mihalich. Cuando dejó a Mihalich en 2013 éste se fue de Head Coach a Hofstra. ¿Por qué este dato es importante? Porque Jay Wright, tras su primera etapa en Villanova con Massimino se fue de entrenador a Hofstra. Será una simple casualidad. Pero la conexión con Wright está ahí.
Segunda etapa en Villanova
Jay Wright se había quedado prendado de Neptune y veía en él un entrenador. Además habían generado un feeling interesante entre ellos a modo de maestro y discípulo. Jay Wright insistió en nombrar a Kyle asistente. Este puesto lo ocupó durante siete temporadas. Si la etapa de coordinador de vídeo fue importante para aprender las dinámicas del juego y el análisis del juego, con esta segunda alcanzó todas las metas que jamás se habría planteado.
Su papel inicial se basó en el desarrollo de jugadores y algunas labores importantes en el reclutamiento. Como reclutador estuvo trabajando por Bryan Antoine, Bryce Wills (al final se fue a Stanford y está en el afiliado de los Wizards), Scottie Lewis (acabó en Florida y ya sabemos lo que hizo en NBA) y Jordan Tucker (Duke, Butler y afiliado de los Bulls). Kyle Neptune salió de Brooklyn y volvió a Villanova.
Sus habilidades humanas y casi de mentor/tutor de los jugadores le sirvió para que hoy en día todos los jugadores que han pasado por los Wildcats sientan una profunda admiración y un cariño muy especial por Kyle.
Confesaba en la charla con Wright que el proceso de reclutamiento que más disfrutó (aunque los medios oficiales no consideran que Neptune estuvo implicado) fue el reclutamiento de Jalen Brunson. De hecho Brunson es uno de sus pupilos con los que mejor relación ha construido, casi de hermanos. Brunson era el cuarto mejor base de la nación y todas las grandes universidades se mataban porque recalase en sus programas. Pero Neptune fue capaz de atraer más que Bill Self, Tom Izzo, Coach K. Algo tendrá el amigo Neptune.
Fugaz HC de Fordham
Cuando llega la oportunidad de tu vida, no puedes dejarla pasar. Y a Neptune le llegó SU oportunidad. Volver a New York, el chico de Brooklyn recibía las llaves de una universidad del Bronx. Fordham es una universidad que podría perfectamente pertenecer a la IVY League. En este caso es una universidad que encajaba perfectamente con la formación de Kyle. Es una universidad privada y católica. Básicamente volvía a sus orígenes en el instituto.
Además pasaba del hormigón de la Big East a masticar cristales en la Atlantic 10. Una conferencia que para algunos es un ladrillo pero para otros es una maravilla de conferencia. La temporada de Kyle Neptune en los Rams fue de la 4º mejor temporada de Fordham en 30 años. Pudieron avanzar un poco más en el torneo de conferencia pero Davidson les aplicó un duro correctivo y las esperanzas de alcanzar el Madness tres décadas después se esfumaron.
Pero la temporada de Neptune fue espectacular tanto en lo deportivo como en lo personal. En una sola temporada consiguió generar un ambiente con los jugadores nada habitual en tan poco tiempo.
Lo que Kyle no sabía es que, antes de que la temporada comenzase, Jay Wright ya había comunicado a Mark Jackson su intención de retirarse tras el Madness. La buena relación personal y profesional de ambos con Neptune, hizo que la temporada de Fordham estuviese muy observada desde Philadelphia. Y que dejaría ser el Kyle Neptune de Brooklyn al de Villanova.
Kyle Neptune on continuing Jay Wright’s culture
— Barstool Villanova (@BarstoolNova) April 22, 2022
pic.twitter.com/IzlTTUCkcA
Por fin Head Coach
Aunque el programa de baloncesto masculino comenzó en 1920, no se asentaron hasta la “adolescencia”. En 1936 el programa empezó a estabilizarse y desde ese momento solo seis entrenadores han ocupado el banquillo de Villanova. Kyle Neptune es el sexto y el nivel es muy difícil de superar:
Alexander Severance. 1936-1961
Jack Kraft. 1961-1973
Rollie Massimino. 1973-1992
Steve Lappas. 1992-2001
Jay Wright. 2001-2022
Kyle Neptune 2022-?
Dejaremos la historia de Villanova para otro artículo pero Neptune tiene un nivel muy alto para igualar. Pero estaba claro que Mark Jackson y Jay Wright querían que Neptune fuese el futuro Head Coach de los Wildcats. Al final Kyle Neptune, fue de Brooklyn a Villanova por última vez.
Ha mamado ATTITUDE, seguirá con esa idea
¿Es Kyle Neptune el apropiado para sustituir a una leyenda como Jay Wright?
De la misma forma que los romanos pensaban que el dios Neptuno sostenía los continentes por la presión que “sus” aguas ejercían sobre las tierras, el lema de Jay Wright ejerce la misma influencia por todo el programa.
El actual asesor principal del Athletic Director –como contaba en el artículo sobre su retirada– estableció en Hofstra el lema ATTITUDE como base para todo el trabajo de los chavales. No se trata de un lema al estilo de Mr. Wonderful. Wright quería hacerles ver que con trabajo duro y con actitud positiva y de trabajo, se podían superar a los bloques plagados de jugadores 5 estrellas. Todo proviene de la hazaña de los Wildcats de 1985 y Jay lo exportó en Hofstra y lo estableció en Villanova cuando tomó los mandos del banquillo.
Kyle Neptune es un discípulo de Jay Wright y –como el mismo Wright y Mark Jackson han dicho– ha crecido como entrenador sobre estos valores que hoy identificamos con Villanova. Desde el primer momento de su nombramiento y en charlas, podcasts y entrevistas posteriores Neptune ha insistido en la continuidad. Kyle demostró desde su época universitaria que la educación ha de ser un pilar para el desarrollo humano. Como asistente y como entrenador también ha demostrado que la formación personal, deportiva y académica son los pilares sobre los que se asientan sus proyectos.
Coach Neptune es un declarado admirador del sistema de Jay Wright por lo que su proyecto será basado en:
Desarrollo lento de los jugadores
Formarlos personal y deportivamente
Reclutar personas por encima de rankings
Construir y moldear jugadores
Trabajar los valores humanos
Defender la cultura de Villanova como hizo su predecesor
Kyle Neptune, de Brooklyn a Villanova
Para salir del paso todos hemos comido cualquier basura de microondas o de restaurante de comida rápida. Pero somos conscientes que la mejor comida es la que se cocina lentamente, se mima y se cuida. Neptune no es el Neptuno volátil y agresivo que los romanos consideraban mayoritariamente. Kyle es el Neptuno que sostiene el planeta con un balance y un equilibrio perfecto.
Al igual que en todos los procesos educativos siempre es más productivo ofrecer una mano de apoyo, un brazo en el que agarrarse cuando hace falta ayuda, un oído dispuesto a escuchar todo lo que tengan que decir y una sonrisa amable y respetuosa que muestre confianza e infunda respeto y cariño.
Cuenta un compañero de instituto de Kyle que durante un entrenamiento Neptune le dijo que si quería ser un jugador importante no era suficiente con ser un buen tirador o un buen manejador. Que un jugador ideal debe ser altruista y dejarse la vida en defensa. Veremos lo que Coach Neptune nos va a ofrecer. Pero está claro que Villanova seguirá siendo un programa que construya y cocine jugadores, formador de personas comprometidas, sin darle importancia al NIL y con pocas visitas al transfer portal.