En este momento estás viendo La maldición de Mike Budenholzer
Las supersticiones nos persiguen

La maldición de Mike Budenholzer

Las supersticiones y las creencias en maldiciones, buena suerte o mala suerte han acompañado al ser humano que van más allá de lo que la Historia ha podido reflejar. Los humanos somos débiles mentalmente y nos apoyamos en creencias o seres superiores para sostener todo aquello que no podemos comprender. Hay vestigios de templos, ritos y demás elementos de corte supersticioso desde el Antiguo Egipto hasta las culturas celtas, desde la Antigua Grecia y la Antigua Roma hasta la Ilustración, desde las sociedades más ignorantes a las más desarrolladas. La creencia en maldiciones siempre ha estado presente. La maldición de Mike Budenholzer en playoffs aún está por comprobar. Pero en el mundo del deporte tenemos una ingente cantidad de maldiciones que aún no se han podido romper y alguna que –muy recientemente– han conseguido destruir.

Los Chicago Cubs y la cabra de Billy Siannis

Aunque en la actualidad los referentes deportivos de la ciudad del viento estén relacionados con los Bulls y el señor Michael Jeffrey Jordan, Chicago ha sido una ciudad de baseball y football. De hecho los Bears de la actual NFL son junto con los Green Bay Packers los equipos más antiguos de la liga. Y los Chicago Cubs –con otro nombre– fueron uno de los fundadores de lo que hoy sería la MLB en la década de 1870. Y precisamente estos Cubs fueron uno de los grandes dominadores de este deporte durante décadas. Llegaron a ganar dos World Series (máximo título de la MLB) a principios del Siglo XX.

Una condena demasiado larga

Pero poco después del fin de la II Guerra Mundial un tabernero de la ciudad llamado Billy Siannis condenó a sus Cubs a una muerte en vida. Billy Siannis cerró su taberna a orillas del Chicago River y se fue al Wrigley Field para ver a su equipo. Pero no iba solo. Le acompañaba su mascota y amuleto (volvemos a las supersticiones). Al llegar al estadio la seguridad no permitió que Siannis entrase con su mascota.

En la actualidad nos parece una burrada, pero igual en 1945 se consideraba algo normal entrar en un recinto deportivo con una cabra maloliente. Billy Siannis maldijo a los Cubs diciendo que nunca más volverían a ganar un campeonato. La segunda parte de la mítica saga de Regreso al Futuro adelantó que en 2015 se rompería esa maldición. Pues casi aciertan. Ya que en ese otoño de 2015 los Cubs se quedaron a las puertas de las World Series. Hubo que esperar un año para que en 2016 se rompiese la maldición de la cabra de Billy Siannis. En Chicago y en gran parte del Midwest la gente lloraba en los bares de emoción. Es algo que no había visto desde el glorioso 19 de mayo de 2000 en el que se rompió la maldición del penalti de Djukic en Riazor.

El Benfica y la maldición de Bela Guttmann

Hoy puede parecernos extraño. Pero en los años 60 el Benfica ganó dos Copas de Europa consecutivas. Después de los cinco campeonatos conquistados por el Real Madrid, los portugueses parecían ser los herederos del trono futbolístico europeo. Tras dos títulos seguidos contra Barcelona y Real Madrid, los lisboetas cesaron a Bela Guttmann –entrenador y arquitecto de las Águilas Rojas– porque el entrenador húngaro pidió un aumento de sueldo. Tras el cese Guttmann profirió la maldición de que el Benfica no volvería a ganar una Copa de Europa en 100 años.

Aunque la Copa de Europa no exista como tal, el club lisboeta no volvió a ganar ningún título europeo tras ocho finales perdidas de lo que hoy conocemos como Liga de Campeones y Europa League. En la actualidad son muchos los aficionados del Benfica que se acercan al cementerio vienés donde está enterrado para suplicar a los restos putrefactos de Guttmann que revierta la maldición.

La maldición de Mike Budenholzer

Desde los años de Atlanta en la que el equipo dirigido por Mike Budenholzer arrasaba en temporada regular, se ha intentado adjudicar al discípulo de Popovich una maldición con la postemporada. Pero la maldición de Mike Budenholzer en playoffs iba más relacionada con que no era capaz de extrapolar su rendimiento de temporada a los meses de abril, mayo y junio. Además se le achacaba una incapacidad para realizar ajustes cuando las cosas se torcían. 

Pero el entrenador natural de Arizona con cara de turista británico en Benidorm desmotó esa teoría negativa en 2021. Tras una temporada buena pero sin ser arrolladora fue capaz de hacer cambios de un partido a otro para dirigir a los Milwaukee Bucks a su segundo anillo. La otra maldición de Mike Budenholzer desde que había llegado a Wisconsin estaba relacionada con los sistemas alrededor de su estrella principal. Y entre mayo y junio de 2021 vimos como las otras estrellas de los Bucks tomaban protagonismo en cada una de las series mientras el griego desarrollaba un baloncesto mucho más altruista. 

La verdadera maldición de Mike Budenholzer

Efectivamente si tenemos que buscar motivos irracionales en torno a la figura de Coach Bud no podemos relacionarlos con sus capacidades como gestor de vestuario. Si no que –y para ajustarnos mejor a la irracionalidad de las supersticiones y maldiciones– debemos buscar lo que los psicólogos llaman “el pensamiento mágico”.

La gran maldición de Mike Budenholzer en playoffs son las lesiones de jugadores importantes en postemporada. En Atlanta este factor no es tan determinante aunque sí que los Hawks sufrieron lesiones de estrellas en el tramo final de la campaña regular.

2019: Malcolm Brogdon

El rookie del año de 2017 se había convertido dos años después en el quinto jugador más importante de los Bucks durante gran parte de la primera temporada de Budenholzer en Milwaukee. Relegado al rol de escolta debido a la fe de Bud en Bledsoe por experiencia en la liga y por su capacidad defensiva; llevaba el peso anotador por fuera sin la espectacularidad de Bledsoe.

Pero el 16 de marzo se anunció que se iba a perder 6-8 semanas debido a una fascitis plantar. Aunque Brogdon no tenía el beneplácito de su entrenador por su graves carencias defensivas –que le harían salir del equipo ese mismo verano– la presencia de Malcolm era fundamental en el quinteto cuando Bledsoe y Anteto se atascaban. Aunque llegó para el último partido contra Boston, no fue capaz de aportar lo esperado contra los todopoderosos Raptors. Con la maraña defensiva planteada por Nurse y llevada a cabo por Kawhi Leonard, Brogdon tenía que haber sido quien desatascase el juego tras quedar Giannis totalmente inutilizado.

Brogdon fue el primero de la maldición de Mike Budenholzer en playoffs con los Bucks.

2020. Giannis Antetokounmpo

Poco se recuerda que el último partido de los Bucks frente a Heat en los playoffs de Disney fueron sin su máxima estrella. Aunque la serie estaba totalmente liquidada con un Jimmy Butler jordanesco, aún se podría haber salvado. Las empezar 0-3 contra Miami y con 11 minutos de juego, Giannis cayó mal sobre su ya maltrecho tobillo. El equipo fue capaz de salvar el partido y pensar que la remontada era posible si el doble MVP se recuperaba. Pero Middleton, Lopez y DiVincenzo no fueron suficientes. Los Bucks perdieron en el quinto partido y tiraron por tierra las aspiraciones del equipo con mejor récord de la NBA antes de que el mundo se parase por la pandemia.

2021. Donte DiVincenzo

Lo que Budenholzer buscaba que fuese Brogdon lo encontró en DiVincenzo. La estrella del March Madness de 2018 no solamente era el tirador excelso de ese torneo. Donte era –como todo buen producto de Villanova– un defensor incansable. Titular indiscutible durante toda la temporada y el mejor refresco para Jrue Holiday cuando el de UCLA necesitaba descanso. Pero en el tercer partido contra los Heat, Donte se rompió el tendón del tobillo izquierdo y los Bucks perdían a un titular básico para el equipo y para los esquemas de Budenholzer.

DiVincenzo sufrió una lesión grave en cada una de las temporadas que jugó en Bucks pero la de los playoffs de 2021 fue la peor de todas porque se ponía en riesgo su carrera y el título del equipo. Al final y gracias a un desgaste sobrehumano de Jrue Holiday, los Bucks pudieron sobreponerse a la baja de DiVincenzo y levantar el segundo campeonato de la franquicia. Pero la maldición de Mike Budenholzer en playoffs seguía presente en forma de lesiones de jugadores importantes.

2022. Khris Middleton

El mayor what if de la temporada 2021/2022 fue el protagonizado por Khris Middleton. Un jugador que había estado sano durante toda su carrera salvo por una leve lesión en la temporada 2016/2017, dejó a todos los fans de Bucks helados tras el segundo partido contra Bulls en abril de 2022. En una serie que iba a ser sencilla, el segundo mejor jugador de Bucks se lesionó y dejaba al equipo para el resto de la temporada. Un esguince del ligamento lateral interno de su rodilla izquierda dejaba tocados a los Bucks. Aunque el equipo era muy completo, Middleton siempre era el responsable de romper los partidos en los momentos clave y de dar la cara por el equipo cuando Anteto se bloqueaba. 

Guía de Playoffs 2023

Tras esa lesión, los Bucks fueron capaces de aguantar a los Celtics hasta el séptimo partido. Pero los de Boston se llevaron la serie y tras ganar a Miami Heat en las finales del este, perdieron la NBA contra los Warriors. Mientras los Celtics no sean capaces de ganar a los Bucks en playoffs con su quinteto sano, les va a perseguir el mantra de “pero es que ganasteis contra unos Bucks sin Middleton”.

2023. Giannis Antetokounmpo

Durante la temporada 2022/2023 el mantra de “Middleton es injury prone” ha estado en todas las conversaciones de los opinadores. Pero como ya hemos dicho, Middleton solo había tenido una lesión importante en su carrera. Se tomó su recuperación con mucha calma pero en el momento clave, recayó. Sorprendentemente jugó el primer partido de playoffs y fue el mejor del equipo sin lugar a dudas.

Pero la maldición de Mike Budenholzer en playoffs volvió un año más. En este caso la víctima fue la gran estrella de los de Wisconsin. En un lance típico de Giannis entrando como un loco hacia el aro, perdió el equilibrio y cayó de espaldas sobre el parquet de forma muy fea. El griego no volvió a la cancha. Un golpe en las lumbares en un jugador tan físico como Giannis puede ser un problema. Pero recordemos que, tras la hiperextensión del ligamento de la rodilla frente a Hawks en 2021, algunos ya retiraban a Giannis del baloncesto. Anteto tiene un físico descomunal pero la maldición de  de Mike Budenholzer en playoffs persigue a los Bucks. Este año la maldición puede recaer sobre Giannis o puede romperse. Pronto lo sabremos.