La Ley de Derechos Civiles (Civil Rights Acts) fue publicada en julio de 1964 producto de una intensa lucha de las “minorías” en Estados Unidos. Esa famosa ley –que supuso un cambio radical en la sociedad estadounidense y que concluía con el camino iniciado por Abraham Lincoln 100 años antes con la abolición de la esclavitud– prohibe la discriminación laboral por «raza, color, religión, sexo, u origen nacional». Esta ley fue clave para que en 1972 se promulgara el Título IX con la siguiente declaración: “Ninguna persona en los Estados Unidos será excluida de participar, negada beneficios, ni sometida a discriminación debido al sexo de la persona en ningún programa o actividad que reciba ayuda económica federal”. Cincuenta años después, la temporada WNBA 2022, ha concluído conmemorando dicha ley por su importancia para el desarrollo del deporte femenino.
La importancia del Título IX en el deporte formativo y profesional
Antes de dicho Título las universidades estadounidenses dedicaban menos del 1% de sus presupuestos al deporte femenino. En los institutos la proporción de deportistas masculinos era 12 veces superior con respecto a las deportistas femeninas. En 1996, con los Juegos Olímpicos de Atlanta a punto de comenzar, se anunció que el verano siguiente se estrenaría la Women National Basketball Association. Los Juegos Olímpicos sirvieron de impulso debido a la abrumadora superioridad del equipo estadounidense. No eran sus primeros Juegos, ya que su estreno fue en Montreal 76. La selección americana ha participado en todos los Juegos Olímpicos –salvo el conocido boicot de 1980– desde Montreal y en todos ellos se ha colgado el oro exceptuando la plata en el estreno canadiense y el doloroso bronce (porque perdieron contra el equipo unificado ruso en semis) en Barcelona.
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La temporada WNBA 2022
La WNBA tiene muchos puntos a favor del fan del baloncesto. Para los amantes del baloncesto más táctico, puro y con alma de entrenador; es una bendición ya que se juega un baloncesto muy al estilo college con mucho peso de la pizarra y de los entrenadores. Además tiene la gran baza de que se juega cuando la NBA y las otras grandes ligas estadounidenses y europeas están de vacaciones. La temporada WNBA 2022, al desarrollarse en un año NO olímpico, tiene mayor alicientes porque se juega del tirón y sin parones. Además la temporada WNBA 2022 aumentó el número de partidos de cada equipo a 36, asentó la Commissioner’s Cup –que la NBA está a punto de copiar– y contó con una serie de maravillosas narrativas que han hecho que fans habituales y no tan habituales del baloncesto femenino se hayan enganchado a la liga.
La temporada WNBA 2022: Últimos bailes
Veinte años después de ser drafteada en el número 1, Sue Bird ha jugado su última temporada. Después de sus dos campeonatos nacionales con UConn, Suzanne Brigit ha conseguido levantar 4 anillos de la WNBA, asistir a 13 All Star, ganarse el hueco en 5 primeros equipos All-WNBA y 3 segundos equipos. Una One-Women-Club de leyenda que ha decidido colgar las botas con emocionantes despedidas en todas las canchas, principalmente en su New York natal, en su Connecticut universitaria y en su Seattle de adopción.
Sylvia Fowles es otra que ha anunciado que deja el baloncesto profesional. Tras 7 temporadas en la ciudad del viento, Sylvia se fue un poco más al norte para liderar a las Minnesota Lynx a dos anillos. La maternidad y las ganas de desarrollar su vida profesional como funeraria (cada uno tiene los gustos que tiene y hay que respetarlos) han sido el aliciente para que nos deje la MVP de 2017.
Queda pendiente lo que pueda pasar con Diana Taurasi y Candace Parker además de la encarcelación de Brittney Griner por posesión de drogas en Rusia.
La temporada WNBA 2022: Becky vuelve a casa
En diciembre las Aces anunciaron que Becky Hammon sería la entrenadora principal durante 5 temporadas. Hammon fue jugadora de las New York Liberty y de las San Antonio Stars, que son las actuales Aces. Extraoficialmente desde 2012 y desde 2014 de facto estuvo bajo el abrigo de Popovich y aunque siempre estaba en las quinielas para hacerse con un banquillo propio en la NBA, nunca le llegó su oportunidad. Su franquicia quiso darle la oportunidad y el resultado se vio desde el primer partido. Un juego alegre, muy táctico, con una defensa durísima y una gestión de vestuario perfecta que nos hicieron ver la huella de su mentor durante toda la temporada.
Todo ello trajo como consecuencia que Las Vegas fueran campeonas de la Commissioner’s Cup y campeonas de temporada regular. Además supo dar con la tecla para que Jackie Young recibiera el premio a la jugadora más mejorada, A´Ja Wilson jugadora defensiva del año y MVP. Y, aunque no recibiera ningún premio más allá del MVP de MassiveBall y WNBAdictas, convirtió a la anterior sexta jugadora del año en la tercera mejor jugadora de la liga y en una copia casi exacta de lo que Becky había sido como jugadora.
La temporada WNBA 2022: El despertar de una futura leyenda
Los que somos fans de la NCAA hace ya tiempo que conocemos a Sabrina Ionescu. La jugadora de las Liberty es una leyenda en la Universidad de Oregon y en toda la NCAA. La flamante número 1 del draft de 2020 no pudo disfrutar de su temporada rookie tras una lesión en el tercer partido de la temporada. Y en la temporada WNBA 2022 Sabrina, con la ayuda de su nueva entrenadora Sandy Brondello y con unas compañeras de enorme calidad, ha vuelto a mostrar el baloncesto que le habíamos visto con las Ducks. Su temporadón la llevaron a alcanzar el segundo puesto en el premio de la Most Improved Player y el octavo en el de la MVP.
Junto con Kelsey Plum, Sabrina ha conseguido que muchísima gente se haya enganchado a la WNBA por ese desparpajo en la pista, esa intensidad, ese compromiso y ese juego desbordante que ha hecho que muchos –que la seguimos desde Oregon– nos hayamos alegrado semana tras semana.
La temporada WNBA 2022: A´Ja A´Ja
No es un error que el nombre de Wilson esté repetido. Es que A´Ja –que hemos descubierto recientemente que se pronuncia como Asia en inglés– ha sido galardonada con el MVP y el DPOY. Jugadora más valiosa y jugadora defensiva del año en una misma temporada es algo que solo había sucedido en cinco ocasiones. A´Ja se une a este selecto club formado por: Yolanda Griffith (1999), Swoopes (2000 and 2002), Leslie (2004) y Lauren Jackson (2007). Además Wilson se une a Cynthia Cooper, Elena Delle Donne y Candace Parker como dobles ganadoras del MVP. Si ganase uno más, entraría en un club VIP con Lauren Jackson, Lisa Leslie y Sheryl Swoopes.
La lucha con Breanna Stewart ha sido muy dura pero al final parece que –a mismo rendimiento– ha pesado más el récord de las Aces.
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La WNBA sigue creciendo aunque necesita seguir mejorando
Son más los aspectos positivos que la WNBA ha conseguido en esta temporada. La asistencia a los pabellones es cada vez mayor. Las audiencias televisivas han crecido un 16% con respecto a la temporada pasada y eso que este dato no contempla los visionados desde el League Pass, que es un regalo por el precio que tiene y lo que nos aporta.
Con el asentamiento de la Copa de la Comisionada se ha dado un impulso y una importancia a la primera parte de la temporada y a los partidos conferenciales. Las condiciones de las jugadores mejora con respecto a otros años. Hemos visto a muchos jugadores de las grandes ligas americanas (NBA, NFL, NHL, MLB y MLS) en los pabellones y dando mucho apoyo a la liga y a las jugadores. El proyecto de expansión con dos nuevas franquicias parece tomar cada vez más cuerpo. Y la atención mediática en Estados Unidos, además de la siempre presente implicación social de la liga es espectacular.
Por supuesto la liga tiene muchos aspectos que mejorar pero la liga es muy joven y solamente se han jugado 26 temporadas. No podemos equiparar los 75 de la NBA frente a las 26 de la WNBA ni los 82 partidos frente a los 36. Aunque como fans y espectadores, nos gustaría que las retransmisiones mejoraran. Que la realización fuese más completa con repeticiones casi instantáneas, que los gráficos de las mismas contuviesen más información…
Pero una cosa está muy clara: la temporada WNBA 2022 ha sido espectacular, divertida, atractiva, competida y ha servido para que una franquicia estrenase su palmarés de campeona. Esperamos con ansia la llegada de mayo para empezar a disfrutar de la temporada WNBA 2023.