Los Grizzlies del mañana

Los Grizzlies del mañana. MassiveBall. Podcast NBA en español
Un oso Grizzly es manso si lo dejas tranquilo

Los osos negros son una de las subespecies del oso pardo. El oso negro es la especie que conocemos como el oso grizzly. Una especie que ronda la media tonelada de peso y que llega a aumentar su peso en más de 100 kg para aguantar bien la hibernación. Cuando nos referimos a los Grizzlies, nuestra mente no establece relaciones con el animal, su forma de vida o su alimentación. Nuestra cabeza se nos va a los Memphis Grizzlies. Aunque en la mente de los más jóvenes los Grizzlies poco más que nacen cuando llega Pau Gasol a Tennessee, ya llevaban seis años en Vancouver. Pero la ciudad más poblada de British Columbia era y es una provincia en la que el baloncesto no tenía demasiado hueco. Así que si querían construir los Grizzlies del mañana, debían tomar un camino más caluroso y sureño.

En Tennessee no hay osos

Está muy claro que en Memphis y en sus alrededores no vamos a ver demasiados osos pero la franquicia no quiso cambiar el nombre cuando salieron de Vancouver. Que conste, que menos mal que optaron por el oso negro porque el nombre que inicialmente eran el de Mounties en honor a la Policía Montada canadiense. Si no fuese por la negativa de la policía, el nombre de Mounties hubiese sido mucho más raro en Tennessee. Sin meternos demasiado en cómo pudieron haber construido los Grizzlies del mañana con los nombres, aunque quizás algo relacionado con el Blues, el Soul, las guitarras Gibson, el Whiskey o un montón de elementos más propios de la ciudad o del estado que los acogió.

¿Qué esperar de los Houston Rockets?

La primera etapa fue más conocida en España por la llegada del mayor de los hermanos Gasol aunque fue mucho más que Pau. Aunque consiguieron llegar a playoffs por primera vez y repetir dos veces más; en ninguna de las tres postemporadas consiguieron ganar ni un solo partido en playoffs. Y eso que en esos años llegaron a conseguir el Rookie of the Year de Pau Gasol, el Coach of the Year de Hubbie Brown y el el Executive of the Year de Jerry West.

El Grit and Grind como estilo de vida

La nomenclatura de los Grizzlies de Mike Conley y Marc Gasol se podría traducir como  agallas y esfuerzo o coraje y trabajo. Fueron un equipo que enamoró a toda una generación por su actitud y porque no daban un balón por perdido. En ese momento ya no estaban construyendo los Grizzlies del mañana, estaban viviendo los Grizzlies del presente como producto de lo que habían construido años atrás.

Los nuevos cuernos de Chicago

Memphis vivió siete años dulces en el que jugaron playoffs todos esos años e incluso alcanzaron unas finales de conferencia en 2013, el año en el que Marc Gasol fue elegido Defensive Player of the Year. Y la verdad es que, si no alcanzaron cotas más altas, fue porque en esos años el oeste era una auténtica locura. Bastante mérito fue llegar hasta donde llegaron con los Clippers de Paul-Jordan-Griffin, los OKC de Durant-Westbrook, los grandes Spurs y el comienzo de la hegemonía de los Warriors.

De Conley y Marc a Morant

La temporada 2018-2019 ya empezaba con bajas expectativas y no se equivocaron los que les auguraban poco más de treinta victorias. A mitad de temporada Marc era traspasado a Toronto a cambio de Valanciunas, Delon Wright y CJ Miles. La temporada horrible les regaló el premio del segundo pick en la lotería del draft en el que se iban a encontrar a Ja Morant. El joven base de la ínfima Murray State había deslumbrado durante toda la temporada NCAA como un base impresionante en las labores de dirección y destacando como el mayor asistente de toda la NCAA. También fue el líder de la liga universitaria en puntos producidos, puntos producidos por partido y turnovers. 

Además de Morant, si querían construir los Grizzlies del mañana, tenían que hacer dolorosos movimientos. Una vez Marc había salido hacia Canadá, era el momento de permitir a Conley que pudiese optar a lo que Memphis no había podido darle. Conley se fue a Utah a cambio de Grayson Allen, Kyle Korver y Jae Crowder. La plantilla juntaba piezas jóvenes con muchísimo talento, fuerzas defensivas de la naturaleza y piezas veteranas para dar estabilidad al bloque. 

Top rookies 2021

Los Grizzlies del mañana empezaban a pintar muy bien con un Morant excelso y, casi unánime, novato del año. Dillon Brooks, Valanciunas, Jaren Jackson, Kyle Anderson, Crowder y Clarke fueron fundamentales en la temporada que tuvo que ser interrumpida en ese aciago marzo.

La construcción no cesa

Tras los movimientos de la noche del draft, la temporada 2020 comenzaba con dos grandes incorporaciones que iban a aportar. Xavier Tillman y Desmond Bane fueron importantes desde el principio destacando como jugadores de rol. Tras una larga ausencia por lesión, Jaren Jackson Jr recuperó su puesto y su forma. Grayson Allen, Dillon Brooks y Desmond Bane rompieron el ataque desde el perímetro mientras que Bane y Allen también se destacaban importantísimos desde la defensa.

Cuatro equipos a seguir esta temporada

Los Grizzlies acabaron la temporada 20-21 novenos del oeste y superaron a San Antonio y Warriors en el play-in pero no pudieron con los Jazz aunque Memphis consiguió rascar una victoria en el primer partido.

¿Los Grizzlies del mañana o del presente?

El draft de 2021 y los movimientos en agencia libre han configurado una plantilla (aún sin cerrar) que ilusiona mucho en Tennessee y que ha plantado las bases para ser un equipo más que importante en el oeste. Han apostado por dos jugadores grandes en el draft con perfiles un pelín diferentes. Williams es un 3-4 con gran capacidad para manejar el balón, buen físico y muy buen defensor. Aldama es un proyecto a largo plazo y que está muy por hacer pero que, en caso de que hiciese falta, podría ser muy útil para ayudar a JJJ.

Amores de Verano

Los Grizzlies son el segundo equipo más joven de la liga con poco más de 23 años de media. Además de la edad de la plantilla, los Grizzlies tienen un equipo que, salvo Steven Adams con ocho y Kyle Anderson con siete, ningún jugador lleva más de cuatro temporadas en la NBA. Pese a que pueda parecer que la falta de experiencia es un lastre, todo lo contrario. Los Grizzlies son un equipo descarado, con un estilo de juego que enamora y con un líder total y absoluto como Ja Morant. 

Luego llegaron los movimientos en la agencia libre con una hiperactividad por parte de Jason Wexler que, desde que llegó en abril de 2019, ha hecho una limpieza y una construcción de franquicia espectacular. El cambio de Allen por Merril es dejar salir a un grandísimo defensor y un mejor tirador por un proyecto de super tirador. Es cierto que con Ziaire Williams ganas el potencial defensivo que pierdes con Allen pero se queda corto. La llegada de Oturu y Adams aseguran la posición de pívot. Con Culver y Edwards dan seguridad y frescura al grupo de guards para que Morant no tenga que cargar con todo el peso y para suplir el poderío triplista perdido con la marcha de Allen.

Omnívoros supervivientes

Los osos grizzlies comen absolutamente de todo, desde todo tipo de peces hasta ciervos pasando por todo tipo de plantas que puedan encontrar. Son animales mansos pero muy protectores. Y aunque no son violentos, sí que van a defender a sus crías por miedo y por incapacidad física. Los Grizzlies son osos lentos y que, por sus más de 500 kg de peso les es casi imposible trepar por los árboles. Por lo tanto, si ven amenazadas a sus crías, no dudarán en ser agresivos.

Y como si los Memphis Grizzlies hiciesen honor al animal que los representan, su juego es manso aunque muy agresivo cuando ven sangre. El futuro de los Grizzlies es brillante y tienen calidad extrema en Morant, Jaren Jackson, Bane, Tillman, Brooks, Culver, Adams, Oturu, Edwards…

Si las cosas se ponen a tiro, Memphis podría entrar en puesto directo de playoff y plantarse en la final de conferencia sin miedo alguno. Porque los Grizzlies del mañana tienen un valor añadido que hemos olvidado. Taylor Jenkins, uno de los asistentes aventajados de Budenholzer, ha demostrado ser un entrenador espectacular y que ha sabido desarrollar a los jóvenes y centrándolos en un estilo de juego que nada tiene que envidiar a los Grizzlies de Marc y Conley. De hecho los Grizzlies actuales son, por talento, muchísimo mejores a sus predecesores del grit and grind.