IGNITE, ¿ÉXITO O PROBLEMA? 

Había mucha expectación en este inicio de campaña por ver a Scoot Henderson, procedente del NBA Ignite. El que fuese pick 3 del draft de los Portland Trail Blazers está llamado a ser la némesis de Victor Wembanyama en esta camada. Un base bajito, pero físicamente potente con gran atleticismo donde la transición y atacar el aro es su mayor virtud. Buen su inicio de temporada con los Blazers ha sido bastante decepcionante.  

Es cierto que la muestra es muy pequeña, solo 4 partidos, pero en 30 minutos promedia 8’3 puntos y 4 asistencias. De estos 4 partidos, 3 los ha jugado sin Afernee Simons por lo que se esperaba que Scoot tuviese más uso y más tiros, no ha sido así, Sharpe se ha postulado como el jugador con más tiros. 

Si vemos a sus rivales por el ROY, Wembanyama aún sin domestrar una dominancia aplastante nos deja flashes del jugador que puede ser, Chet Holmgren ha adelantado a Scoot por la derecha y parece el rival del pívot francés por el rookie del año. Mientras que Brandon Miller, el discutido pick 2 elegido delante de Henderson sin hacer mucho ruido lleva de promedio 17’3 puntos y 6 rebotes. Entonces ¿Es Scoot el problema? 

Eso me preguntaba yo en twitter y un usuario al que le debo la idea de este artículo me argumento bien que todos los jugadores que han pasado por Ignite les cuesta iniciar las temporadas debido a la nula competitividad de sus partidos comparados con la NCAA o ligas internacionales, y analizando en frío está en los cierto. Jalen Green, Jonathan Kuminga, Dyson Daniels y otros jugadores drafteados del equipo cantera de la NBA han tenido primeros años discretos a nivel de juego. Entonces para los jugadores de High School ¿es Ignite una solución o un problema? 

NACIMIENTO DE NBA IGNITE

Tras muchas polémicas con la NCAA donde las universidades no solo no pagaban a jugadores, sino no dejaban a los chavales cobrar patrocinios, la NBA vio una oportunidad para seguir creciendo, creando un equipo para los jóvenes que busquen otras vías desde High School y no tuvieran que irse a otras ligas como China (Mudiay) o Australia (Lamelo Ball o RJ Hampton).  

La creación de Ignite busca por un lado dar a los jóvenes un salario adecuado, una oportunidad de ver como se vive la NBA por dentro gracias a la G-League y, por otro lado, expandir la liga de desarrollo y conseguir un cebo para el aficionado de ver la liga de desarrollo de la NBA.  

A priori parece un plan sin fisuras, pero se encontraban con un titán como es la NCAA. La liga universitaria tiene mucha expectación en el público americano, la Final Four del March Madness baten año a año récords de visualizaciones y agotan las ventas de entradas. Es más, en más de una ocasión la final universitaria ha sido más vista que la propia final NBA. Con todo ese poder el CEO de la NCAA, Mark Emmett se veía muy tranquilo ya que ningún talento 5 estrellas decidiría ir a la G-League viendo la repercusión que tenía la liga universitaria, hasta que 9 de noviembre de 2019 estalló la bomba que cambiaría todo. 

James Wiseman, actual pívot de los Pistons y por aquellas fechas el prospect más prometedor de todo Estados Unidos, era sancionado por la NCAA a no jugar un partido más por recibir un pago de 11500 dólares para ser reclutado por la Universidad de Memphis, algo ilegal para Emmett y los otros capos de la NCAA donde argumentan que aquí no se viene a ganar dinero sino a instruirse en cuanto a conocimientos y crecer como persona. Tras negociaciones, la liga universitaria puso 12 partidos de sanción, pero el propio Wiseman decidió dejarlo y entrenar por su cuenta y eso le sirvió para ser pick 2 en el próximo draft. 

Con esta última polémica la NBA aprovecho a crear su equipo y el 16 de abril de 2020 se presentó NBA Ignite G-League con ya algunos nombres de gran cartel pactados. 

GRANDES RECRUITS

Ignite no se reservó medias tintas en su presentación ya que ese día anunciaron a Jalen Green como primer recruit de la franquicia G-League, que en ese momento estaba el top 1 rankeado como mejor jugador de la camada de High School de 2020 en Estados Unidos. También se le unieron Isaiah Todd (rankeado el 15) y Diashen Nix (rankeado el 21). Pero el duro golpe fue el 17 de julio cuando Jonathan Kuminga, top 4 rankeado y en ese momento el jugador por el que se peleaban todas las universidades decidió firmar por el equipo de G-League formando un equipo bastante atractivo de ver para el fan del draft y que daría bastante audiencia a G-league comparada con la que ya tenía antes. 

NBA Ignite

Algo similar pasó en 2021, con Jaden Hardy en ese momento top 2 de su camada firmando por el equipo de la G-League y Michael Foster en el 9. Pero Ignite decidió que su plan no era solo firmas promesas americanas y firmó a Dyson Daniels, un guard que lo estaba rompiendo en Australia y que su molde, muy similar a Ben Simmons sería un gran atractivo para el equipo. Además, también ató antes de tiempo a Scoot Henderson, que, aun quedándole un año de instituto, con 17 años, se marchaba a la cantera de la NBA siendo la pieza principal de esta camada, ya que en ese momento se hablaba maravillas de Scoot como jugador generacional. 

NBA Ignite

En 2023 Scoot se quedaba y llegaban desde Canadá Leonard Miller y desde España Sidy Cissoko, confirmando que este proyecto también atraía y cazaba jugadores fuera de las fronteras. 

De todos los jugadores que hemos mencionado solo Diashen Nix y Michael Foster le fueron mal su paso por Ignite, no llegando a ser drafteado por la NBA, aunque el primero consiguió un contrato dual con los Houston Rockets y el segundo estuvo en la franquicia G-League de los Sixers. Los demás apenas bajaron su stock. 

Para esta presente temporada la caza de talentos aún ha sido mayor. Ron Holland, rankeado top 2 de su camada, Matas Buzelis top 5, Dink Pate top 30, London Johnson top 50 del año pasado e Izan Almansa como uno de los prospectos internacionales más prometedores que se recuerde, ganando varios títulos internaciones con España y pronosticado top 10 de este presente draft. 

NBA Ignite

EL GRAN PROBLEMA DE IGNITE 

Sin duda la NBA ha conseguido su objetivo, atraer al espectador medio a ver, aunque sea un partido de Ignite G-League. Las promesas que están pasando por el equipo son deliciosas de ver, pero tienen un problema. La falta de competitividad de los partidos. 

Esto se debe a que como la NBA no quería que su equipo interfiriera en el Torneo de la G-League todos los partidos que juega Ignite, 32, son de exhibición, son amistosos, no cuentan para ningún torneo, y eso hace que ni el rival ni ellos se esfuercen. La NBA ha intentado solucionarlo trayendo veteranos al equipo como fueron en su día Jarrett Jack, Kosta Koufos o Amir Johnson, pero no es suficiente. 

La NCAA es un torneo con el March Madness como máximo activo de valor en cuanto a competitividad, luego los jugadores que vienen de otros países disputan sus ligas locales y torneos continentales (Europa, Euroliga o Eurocup, Sudamerica, la Liga sudamericana de baloncesto etc). Mientras que estos chicos están un año entero sin disputar partidos de competición. Por ello a Jalen Green, Jonathan Kuminga, Dyson Daniels o más recientemente, Scoot Henderson, les está costando mucho encontrar el nivel y potencial que prometen, ya que han estado uno o dos años sin competir. 

Si queréis estar al tanto de las entrevistas que hemos realizado a jugadores del equipo NBA Ignite de la G-League, os recomendamos hacer click en el siguiente enlace de MassiveBall: Entrevistas Jugadores de Baloncesto