En el draft, ese último puesto viene con un mote en EE.UU, «Mr. Irrelevante», y puede que Isaiah lo sea en estos momentos, pero no olvidemos que antes de los Jays Jays y antes de Kyrie o Kemba existió IT4.
Quizá hubiera existido antes de no caer en Sacramento, pero sus primeros años estuvieron marcados por grandes números y pocas victorias, tras tres años llega a Phoenix a un proyecto de base con tres cabezas que no acabó de funcionar. El valor de Isiah no es muy alto en estos momentos, y Boston en mitad del año se hace con el por Marcus Thornton y una primera ronda del 2016.
Que yo recuerde, nadie pensó que este movimiento sería la llave para cerrar el periodo de reconstrucción tras el Big 3, pero con IT comenzaron los playoffs de nuevo. Los dos primeros años terminaron con salida en las dos primeras rondas, sin embargo el TD Garden tenía de nuevo un ídolo, el mas pequeño y con el corazón más grande.
En caso de quedar alguna duda, en el primer año de los Jay en plural, Isiah hizo una de las mejores temporadas estadísticas que se le pueden recordar a un jugador de menos de 1,80 (Iverson media 1,83 en teoría).
No solo fueron números, fueron unas finales de conferencia, amen de la historia de un hombre que perdió a su hermana pequeña en la primera ronda, y volvió para el partido número 1 de la segunda ronda. Si sus acrobacias, bandejas imposibles y acierto desde el triple no bastan, este gesto basta y sobra para añadirle al lore de los Celtics de por vida.
Todos sabemos que pasó al final, lesión de cadera y Danny «yo no me caso con nadie» Ainge, lo cambió como una pieza usada por Kyrie, en un movimiento que posiblemente hubiera hecho cualquier GM, y que posiblemente sea la razón para que el padre de AD dijera que su hijo jamás jugaría para alguien así.
Solo fueron tres años, un tiempo muy breve, pero él que lo vio no lo olvidará. Isiah hoy por hoy es ese señor que pide una oportunidad a quien lo quiera escuchar en las redes sociales, y es comprensible que cueste dársela pues en Washington y Cleveland no demostró ser capaz de replicar aquellos años mágicos.
¿Volveremos a verlo en la mejor liga de baloncesto del mundo?